“Lo que va, viene”, dice el proverbio, y el ex líder haitiano “rebelde”, Guy Philippe, debe estar reflexionando sobre esta verdad kármica mientras languidece en su celda de la cárcel de Miami, Florida.
En febrero de 2004, desempeñó un papel clave ayudando a las Fuerzas Especiales estadounidenses a secuestrar al entonces presidente Jean-Bertrand Aristide de Haití y llevarlo a un exilio de siete años en África. Hoy, Philippe afirma, a través de su abogado, que agentes del gobierno estadounidense lo secuestraron ilegalmente desde Haití el 5 de enero de 2017 y, con una conducta “chocante y escandalosa”, lo llevó a Florida para ser juzgado porque tiene “demasiada información” sobre el derrocamiento de Aristide por parte de Washington.
En noviembre de 2005 (21 meses después del golpe contra Aristide), un gran jurado estadounidense emitió una acusación de tres cargos contra Philippe por narcotráfico y lavado de dinero entre 1997 y 2001. Después de su detención en Haití y el transporte a Miami, Philippe se declaró inocente de los cargos a través de su abogada basada en Hollywood, FL, Zeljka Bozanic. El 28 de febrero de 2017, presentó ante el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en Miami dos mociones para desestimar y una moción para disminuir (suspender temporalmente) el caso contra Philippe.
Una moción para desestimar sostiene que los Estados Unidos tomaron demasiado tiempo para arrestar a Philippe, de 49 años, desde la acusación de 2005. “No hubo actividad alguna y ningún esfuerzo por parte de los Estados Unidos para llevar al Sr. Philippe a juicio hasta el secuestro del acusado el 5 de enero de 2017”, argumenta Bozanic.
Ya sea por ignorancia o deshonestidad, esta afirmación es patentemente falsa, ya que agentes de la Brigada Antidrogas de Haití (BLTS) y de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) realizaron al menos dos incursiones conjuntas muy publicitadas para capturar a Philippe en Haití en 2008 y 2009. Philippe, que entonces vivía en el remoto pueblo costero de Pestel, “escapó por poco de la captura al huir a pie a las colinas”, explicó un cable de la Embajada de EE.UU. de 2009, difundido a través de Wikileaks.
Por otra parte, el fiscal federal Wifredo Ferrer publicó una declaración el 6 de enero diciendo que “el paso del tiempo no frustra el compromiso inquebrantable de mi oficina y de nuestros socios locales e internacionales de la ley para identificar, arrestar y procesar narcotraficantes y blanqueadores de dinero que amenazan a la comunidad global”.
La segunda moción de desestimación sostiene que los hombres “presuntamente agentes de los Estados Unidos” arrestaron a Philippe en Puerto Príncipe el 5 de enero y estaban listos para matarlo. El gobierno y los testigos de Haití dicen que la policía haitiana hizo la detención sin lucha.
“Lo tomamos como un bebé”, dijo un oficial de policía haitiano, según el Miami Herald.
POR PRIMERA VEZ, GUY PHILIPPE HA ADMITIDO PUBLICAMENTE SU COLUSIÓN LARGAMENTE SOSPECHADA CON WASHINGTON EN EL DERROCAMIENTO DE ARISTIDE EN EL AÑO 2004.
Sin embargo, Bozanic lamenta que “la cabeza de Philippe estaba cubierta por una capucha” y que “estaba encerrado en un coche durante aproximadamente tres o cuatro horas … [y] obligado a sentarse en un piso muy caliente del vehículo, ya que el motor estaba justo debajo de él [sic] … sin comida ni agua.”
“El demandado aquí afirma que la conducta de los Estados Unidos era tan inaceptable que constituía una violación del debido proceso sustantivo”, escribió Bozanic, y “las acciones de los Estados Unidos deberían sacudir la conciencia judicial de esta Corte lo suficiente como para desencadenar sanciones de debido proceso, Incluido la desestimación de la […] acusación.”
Bozanic admite que “es consciente de la Doctrina de Ker-Frisbie que en esencia declara que una vez que el demandado está ante la Corte, la Corte tiene jurisdicción sobre su persona”. Sin embargo, ella “mociona a desestimar porque la conducta de los Estados Unidos era tan escandalosa que corresponde efectivamente una excepción a la Doctrina Ker-Frisbee [sic]”.
Lo que es más significativo, en la misma moción, Bozanic dice que “El Sr. Philippe ha sido una espina en los ojos (sic) del Gobierno de los Estados Unidos durante muchos años”. Dice que “ayudó a los Estados Unidos a derrocar al ex presidente haitiano Aristide en el golpe de Estado” y que por lo tanto “sencillamente tenía demasiado información y se convirtió en un peligro para el gobierno de los Estados Unidos”.
La declaración es significativa porque es la primera vez que Guy Philippe ha admitido públicamente la colusión largamente sospechada con Washington en el derrocamiento de Aristide en 2004. La fuerza de Philippe de unos cuantos centenares de “rebeldes” en Cap Haïtien fue utilizada por el Jefe Adjunto de Estación de Estados Unidos Luis Moreno como una amenaza para coaccionar a Aristide a dejar su hogar en Tabarre para una conferencia de prensa en el aeropuerto el 29 de febrero de 2004 (el cumpleaños de Philippe). Pero una vez en el aeropuerto, Aristide, su esposa y su contingente de seguridad privada fueron obligados a abordar un avión estadounidense sin marcar, en el que fueron trasladados a la República Centroafricana. Desde el exilio al día siguiente, Aristide lo llamó un “secuestro moderno“.
En 2006, el autor Peter Hallward preguntó a Guy Philippe en una larga entrevista si había recibido alguna ayuda de Estados Unidos y Francia mientras organizaba y equipaba a sus “rebeldes” anti-Aristide en República Dominicana de 2001 a 2004. Philippe fue evasivo pero dijo: “Hay algunas cosas que no puedo revelar en este momento, pero todo está en [mi] libro que aparecerá en 2012, si estoy o no yo mismo vivo.” El libro de Philippe aún no ha sido publicado.
Bozanic también presentó una “moción para suspender” los procedimientos contra Philippe porque “tiene derecho a inmunidad como funcionario estatal extranjero de Haití.” Funcionarios del gobierno del presidente interino Jocelerme Privert dijeron que Philippe habría tenido inmunidad bajo la ley haitiana si hubiera sido juramentado para un mandato de seis años como senador para el departamento de Grand-Anse, cargo al que fue elegido el 16 de noviembre de 2016. Además, en virtud de la ley electoral de 2015, los candidatos oficiales en Haití son inmunes a arresto y enjuiciamiento.
Sin embargo, el equipo de policía que capturó a Philippe eligió el período entre las elecciones del 16 de noviembre y la toma de posesión de los nuevos parlamentarios el 9 de enero, cuando el senador electo estaba legalmente vulnerable. El 7 de febrero, Jocelerme Privert, a quien llama Bozanic “un viejo enemigo político del senador Philippe”, pasó la faja presidencial a Jovenel Moïse, que es un aliado político cercano del ex líder neo-duvalierista “rebelde”.
Mientras tanto, en Washington, DC, el presidente Donald Trump sucedió a Barack Obama el 20 de enero. El Fiscal Ferrer, designado por Obama, renunció a su cargo el 15 de febrero y se dejó el cargo el 3 de marzo. Es reemplazado por su asistente Ben Greenberg hasta que Trump nombre a su sucesor, a la espera de la aprobación del Senado.
También el 28 de febrero (el plazo de la Corte para las mociones), el fiscal federal Ferrer presentó varias peticiones in limine para evitar que ciertas pruebas sean presentadas por Philippe y su abogada. Lo más interesante, Ferrer mocionó para prevenir que Philippe “eleve como una defensa” que el dinero que supuestamente lavó “se derivó – directa o indirectamente – del gobierno de Estados Unidos o de personas autorizadas para actuar en nombre de los Estados Unidos.”
La razón? “Ausencia de notificación adecuada por parte del demandado.” Las mociones de Ferrer también buscan bloquear la defensa de la inmunidad oficial de Philippe, así como el privilegio de Philippe de comunicaciones maritales confidenciales con su esposa, Natalie, que es ciudadana de los Estados Unidos. Ella tampoco debería poder invocar “su privilegio de la Quinta Enmienda para permanecer en silencio en caso de que testifique”, dijo Ferrer.
Bozanic – cuyas mociones tienen errores gramaticales, faltas de ortografía, y faltan muchas palabras – también afirma que “Philippe fue a la Embajada de EE.UU. [en Haití] en 2006 [después de la acusación de 2005] y no fue arrestado”. El Departamento de Estado de Estados Unidos todavía no ha respondido a las preguntas de Haïti Liberté sobre si Philippe visitó la embajada de Estados Unidos en 2006 y, en caso afirmativo, por qué y lo que se discutió.
Sin embargo, lo más importante es que las mociones del acusado Philippe y del fiscal Ferrer sugieren que los vínculos financieros y políticos, deducidos por muchos analistas, entre Guy Philippe y Washington en el golpe de estado de 2004 en Haití, finalmente serán develados… si es que el tribunal lo permite.
Traducción del inglés Diálogo 2000-JS Argentina, por https://haitinominustah.info